Todo un acierto visitar la isla de São Miguel, San Miguel en castellano, la isla verde de las Azores. Nosotros hemos ido en enero, lo cuál tiene la gran ventaja de poder reservar sin margen y hacer turismo sin gente, pero en cambio estás sujeto al tiempo y algunas actividades cierran antes. Si estás pensando visitar esta isla de las Azores en invierno, aquí tienes algunos consejos y sitios que visitar.
Recomendaciones previas de San Miguel
La isla es grande y las cosas para ver están muy repartidas, por lo que necesitarás un coche para poder moverte. Para que te hagas una idea, de tamaño es como la isla de la Palma. Nosotros nos alojamos en un airbnb en Ponta Delgada, un punto muy estratégico porque está muy bien comunicado con todo.
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Si viajas en tiempos de COVID mira bien las restricciones. Para entrar a las islas con el certificado de vacunación es suficiente, pero para entrar a Portugal ahora mismo tienes que entregar un test negativo y rellenar el formulario. Ojo, el formulario también lo tienes que rellenar para ir a la península desde las Islas, aunque solo hagas escala.
Por último, si has leído lo del vuelo gratis con SATA, me temo que lo quitaron para los turistas en noviembre de 2021.
Qué ver en San Miguel
A continuación te dejo el mapa de la isla con algunos lugares destacados y os comento algunos sitios interesantes para ver, organizados por rutas diarias por si os sirve de ayuda.
Día 1 en San Miguel
El primer día como llegamos por la tarde fuimos a visitar Ponta Delgada. La ciudad se ve pronto, podéis dar un paseíto por su casco antiguo y por el puerto, desde el que por cierto se ve un atardecer muy chulo.
¿Cosas para ver y hacer en Ponta Delgada? Destacaría el icono de la ciudad, las Portas da Cidade, sitios como Forte de Sao Bras y la Ermida Mãe de Deus, y subir a la Torre Sineira, que es gratis y desde allí tienes unas vistas interesantes de Ponta Delgada, o visitar su mercado. En general, Ponta Delgada es para perderse por sus calles, en las que encontrarás muchos edificios antiguos e iglesias.
Aparcar en Ponta Delgada
El casco antiguo es de pago hasta las 19h, pero hay aparcamientos gratuitos como el del Mercado da Graça y el de la R. São Francisco Xavier en los que puedes dejar el coche a cualquier hora. De todos modos fíjate porque en las calles te va señalizado dónde comienza y dónde termina la zona de pago.
Día 2 en San Miguel
El segundo día lo dedicamos a visitar la parte oeste de la isla. Primero fuimos a Lagoa do Canario, al que vale la pena bajar aunque solo sea por ver sus árboles con los troncos de color verde intenso.
Desde allí comienza una pequeña caminata hasta el mirador de Boca do infierno, que ofrece unas vistas increíbles de los lagos de Sete Cidades. Parada obligatoria 🙂
Desde el mismo parking sale una ruta de dos horas por el pico das Eguas y sus lagos. Nosotros tuvimos que hacerlo con niebla, pero la ruta es chula.
Una vez de vuelta fuimos al mirador Vista do Rei y subimos al Monte Palace, un hotel de 5 estrellas abandonado y saqueado, pero que ofrece sin duda las mejores vistas a la Caldera.
Continuamos nuestra ruta por Sete Cidades, el pueblo en sí lo único que tiene es una iglesia con mucho encanto por la que pasarás con la carretera, pero el recurrido es súper bonito.
La siguiente parada hacia el oeste fue Ponta do Escalvado, un mirado desde el que se puede ver Mosteiros.
La siguiente parada, Ponta de Ferraria. Se puede bajar al faro, pero casi tiene más encanto verlo desde el mirador. Después de todo el día viendo el verde tan intenso de la isla, llama mucho la atención el negro de la lava de Ferraria. Desde allí bajamos hasta las pozas termales, en la que se puede dar un bañito en agua caliente si la marea lo permite.
Día 3 en San Miguel
El tercer día lo destinamos a la parte norte de São Miguel. Estuvimos en Ribera dos Caldeiros, un parque que puede recorrerse en poco tiempo pero que sorprende por cómo tienen cuidado para el turismo, con sus merenderos. Allí puede verse un molino de agua y su cascada.
De camino hay varios miradores que están bien, como el mirador de Santa Iria.
Ya que estás por allí puedes aprovechar para ver cosas del Nordeste como Ponta do Amel, donde por cierto leímos que es mejor dejar el coche arriba porque la cuesta es complicada.
Siguiendo la ruta por el norte, nuestra siguiente parada fue el Salto da Farinha, una cascada inmensa a la que llegas andando después de una bajada muy empinada, pero a la que ahora mismo no se puede acceder del todo porque se ha debido caer el puente que conecta desde abajo.
Muy cerca también están los campos de té de Gorreana. Como dato curioso, en las islas Azores se encuentran los únicos campos de té de Europa, y está fábrica sería la más antigua. Puedes dejar el coche en la tienda y hacer el recorrido por los campos a pie, la ruta empieza cruzando la carretera.
Para terminar el día fuimos Lagoa de Congro, un lago verde en medio de la naturaleza que es todo un remanso de paz.
Día 4 en San Miguel
Comenzamos los baños termales en la isla. Furnas parece un parque temático, están las propias caldeiras que se pueden visitar, Terra Nostra y la Poça de Dona Beija. Importante mirar los horarios para organizarse bien y poder disfrutar de todo, nosotros tuvimos que modificar la ruta por eso.
Lo recomendable es ir por la mañana a Terra Nostra, ya que cierran a las 16:30. Pasear por sus bonitos jardines y darse un baño en el jacuzzi y en el estanque amarillo en el que no se ve ni el fondo, todo calentito claro. El bañador saldrá amarillo, así que si puedes lleva algo oscuro. Entrar cuesta 10 euros.
Desde Terra Nostra puedes ir a pasear por Lagoa das Furnas o ver las Caldeiras, que son todo un espectáculo.
También puedes ir a ver el mirador del Salto do Cavalo para ver Furnas desde arriba.
En enero atardece a las 18h. Un buen sitio para ir a ver el atardecer es el Miradouro do Pico dos Bodes.
La Poça de Dona Beija cierra a las 23h y puedes estar hasta una hora y media. Por la tarde suele estar muy concurrida pero merece la pena esperar para darse un bañito de noche. No hace falta reservar, ni aquí ni en Terra Nostra, y cuesta 6 euros la entrada. Eso sí, cuanto más tarde vayas, menos gente.
Día 5 en San Miguel
Para el quinto día una buena opción sería ver la ermita de Vila Franca do Campo, Ermida de Nossa Senhora da Paz, que seguro que habrás visto en muchas fotos de la isla.
Otra parada indispensable es Lagoa do Fogo y las Caldeira Velha. Nosotros fuos primero al Salto de Cabrito, al que se puede llegar en coche. Aunque tenga al lado la central eléctrica, la cascada es bonita.
Si vas a bañarte en Caldeira Velha puedes reservar desde esta página, ya que tienen un máximo de personas y los tramos son cada dos horas. También tienes la opción de solo visitarla, sin baño, para lo que no suele haber problema si vas directamente. El coste es 3 euros para visitar y 8 euros para bañarse. Cierran a las 17:30, tenlo en cuenta de cara a organizarte.
Por último, Lagoa do Fogo es otro sitio de San Miguel que no te dejará indiferente. Reserva un rato para sentarte a verlo desde uno de sus miradores, vale la pena.
San Miguel es uno de los sitios del mundo en los que mejor se ve las ballenas. Aunque existen excursiones durante todo el año, a partir de marzo es más probable que puedas ver ballenas y delfines. Tenlo en cuenta por si quieres añadir la excursión en tu ruta.